Las estaciones de servicio de Shell y Puma en todo el país han dado un paso al frente con un incremento significativo en los precios de sus combustibles. Este aumento se atribuye a la devaluación reciente y al vencimiento del acuerdo previo con el Gobierno. Mientras tanto, YPF aún no ha ajustado sus valores. Veamos cómo se desarrolla esta nueva dinámica en el mercado de los combustibles.
Impacto de la Devaluación y el Fin del Acuerdo
Las petroleras han confirmado el aumento de precios en sus estaciones de servicio, y este aumento se ha reflejado desde la medianoche de hoy. Este cambio no es sorprendente considerando el aumento del dólar oficial, que subió un 22,4% de $298,5 a $365,5 entre el viernes y el lunes, lo que tiene un impacto directo en los costos de las empresas petroleras.
Por otro lado, las compañías ya no están sujetas al acuerdo de precios con el Gobierno, ya que dicho convenio venció el 15 de agosto. Además, el aumento correspondiente al mes anterior (4,5%) se aplicó antes de lo programado, impactando a principios de este mes, a pesar de que originalmente se había acordado para una fecha posterior.
YPF se Mantiene por Ahora
Si bien este aumento en los precios de los combustibles tendrá un impacto en los costos de distribución y, por lo tanto, en los precios de varios productos a nivel nacional, el impacto inicial se sentirá en los bolsillos de los conductores. Hasta el momento, las estaciones de servicio de YPF no han seguido la tendencia alcista de Shell y Puma. Los precios actuales en las estaciones de servicio de YPF, que representan más de la mitad del mercado, son los siguientes:
- Nafta súper: $213,80
- Nafta premium: $274,42
- Gasoil: $229,69
- Gasoil premium: $313,50
A pesar de que existen otros factores que influyen en el precio de los combustibles, como el dólar y el precio del barril de petróleo en el mercado internacional, las cifras oficiales demuestran que, entre agosto del año pasado y el mismo mes de este año, la nafta súper ha experimentado un aumento nominal del 55,4%. Mientras tanto, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del INDEC ha aumentado en un 113,4%. Esto sugiere que, durante un período de doce meses, los precios en la bomba han experimentado un ajuste que está significativamente por debajo de la inflación general. Se espera que esta diferencia disminuya en agosto, ya que el impacto del dólar en el IPC general tiende a ser más gradual en comparación con los precios de los combustibles. El equilibrio entre estos factores seguirá siendo un punto importante a seguir para los consumidores y la economía en general.