En los campos de Río Segundo, Córdoba, nace una innovadora empresa: Garlic, la primera productora de ajo negro de la provincia. Enrique Barra, un ingeniero en alimentos, descubrió este peculiar producto en Chile y vio el potencial en la escena gastronómica cordobesa. Cinco años después, Garlic produce tres toneladas de ajo negro mensuales, un producto con aplicaciones terapéuticas y gourmet.
Un Producto Único: Ajo Negro
El ajo negro se produce a través de un proceso de 45 días que implica un control meticuloso de humedad y temperatura. Su sabor suave y textura cremosa lo convierten en una delicia culinaria, especialmente popular entre los aficionados a la gastronomía gourmet.
De Córdoba al Mundo: Proyección Internacional
Garlic ha ganado terreno en Argentina, con su producto llegando a diversas provincias. Actualmente, abastecen a Corrientes, Entre Ríos, Santa Fe, Buenos Aires, Mendoza, Santiago del Estero, Salta, Neuquén, Río Negro y Santa Cruz. Sin embargo, su mirada está puesta en Brasil, el principal país consumidor de ajo a nivel mundial.
El Éxito de una Pyme Cordobesa
Con un enfoque en la calidad y la excelencia, Garlic se ha convertido en una marca representativa de Córdoba en el mundo gourmet. Gracias a sus esfuerzos y demanda creciente, la empresa planea aumentar su producción a seis toneladas mensuales y expandirse al mercado brasileño.
El ajo negro de Garlic es más que un producto: es una historia de innovación, pasión culinaria y proyección internacional, todo nacido en la provincia de Córdoba.
